La primera semana de enero, la administración del Presidente Trump presentó su plan de infraestructura para 2018. Este plan enumera las principales prioridades legislativas: construcción de carreteras, puentes y autopistas.

El Instituto de Petróleo de Estados Unidos (API por sus siglas en inglés), el mayor grupo de presión sobre petróleo y gas, envió un recordatorio a los legisladores. El presidente y director ejecutivo de API, Jack Gerard, afirmó que los miembros de API quieren poco en términos de dinero: “Estamos tratando de recordarle a la gente: mantennos como parte del plan de infraestructura”, “no estamos buscando un programa gubernamental, no buscamos financiamiento”, destacó.

API tiene como objetivo cambiar la Comisión Federal Reguladora de Energía (FERC por sus siglas en inglés) que supervisa las prpuestas de revisión para construir terminales de gas natural licuadoy gasoductos interestatales de gas natural. API quiere permisas más rápidos para ductos y otros proyectos. “Todos estamos a favor de las leyes para autopistas. Todos estamos a favor de los puentes y carreteras, mencionó Jack Gerard, al afirmar su mensaje: los ductos también cuentan como infraestructura.